Recordando viejos tiempos


Hace ya muchos años que nuestra amistad comenzó, tantos como 11 y en todo ese tiempo nunca hubo una pelea entre nosotras, nada malo sino una gran complicidad. Muchos dijerón que eramos demasiado diferentes como para llevarnos bien y que tu marcha a 900 km de aquí sería el punto y final; pero hoy podemos decir que se equivocarón.

Esta semana motivos familiares te trajerón de vuelta a tu ciudad, esa que tanto te gusta y que no olvidas y de paso de vuelta a nuestra vidas, a ese corillo pequeño que no te olvida por lejos que estes.
En fin no me voy a extender más que me pongo sentimentaloide y no me gusta. Solo darte las gracias por no cambiar nunca y por hacerme disfrutar tanto aunque sea tan solo frente a un café!

2 Comments:

Anónimo said...

Eso no sólo demuestra que los demás se equivocaban, también es un ejemplo precioso de cómo una buena amistad puede con algo tan fuerte como es la distancia. Me alegro un montón niña. Seguid así.

Unknown said...

Lo que da de sí un café! :)
Menos mal que no siempre la distancia hace el olvido

 
Mais la nuit...il dort! - by Templates para novo blogger